


Pacientes con falta de hueso: Implantes Cigomáticos
La pérdida de dientes siempre conlleva la pérdida de hueso que lo soporta. Esta situación es especialmente dramática en aquellos pacientes que han estado durante tiempo sin dientes o utilizando dentaduras postizas, pues sufren este proceso de pérdida ósea importante, ocasionando una falta de hueso maxilar e impidiendo por tanto la colocación de implantes convencionales. Estos pacientes anteriormente tenían que sufrir multiples y costosas intervenciones para solucionar su problema. Sin embargo, en la actualidad, podemos ofrecer una tratamiento fácil, rápido y económico con total garantía: los implantes cigomáticos. Son muchos los pacientes con problemas de falta de hueso que vienen a visitarme a la consulta de Barcelona con ganas de recuperar su sonrisa. Afortunadamente somos expertos en implantología avanzada y podemos ofrecer una larga experiencia en este tipo de tratamientos, pues nos hemos convertido en un centro de referencia.
Índice del artículo
¿Qué son los implantes cigomáticos?
Este tipo de implantes se usan especialmente para pacientes que han perdido tanto la cantidad como la calidad en el hueso maxilar y la colocación de unos implantes dentales corrientes no es posible.


¿Cómo es la colocación de los implantes cigomáticos?
Como ya conocéis de otros posts y tratamientos, la planificación previa es clave para el éxito del procedimiento. En implantología lo primero que necesitamos es un TAC para poder realizar un diagnóstico preciso, así ofrecer la mejor solución de forma predecible y fiable. El día de la intervención es realmente cómodo y rápido para el paciente. Colocaremos dos implantes cigomáticos combinados con cuatro implantes convencionales, dependiendo del caso, se trata por lo tanto de una técnica híbrida en realidad. También hay casos más severos donde los cuatro implantes deberán colocarse en los malares del paciente, lo que se denomina un cigoma duplo. Los implantes dentales, gracias a la planificación previa, se colocan rápidamente en la consulta y solamente requieren de anestesia local y a veces de sedación consciente para una mayor comodidad del paciente. Al ser una técnica de carga inmediata, el tiempo de la intervención es mucho menor que con otras técnicas y, más importante aún, el paciente sale sonriendo de la consulta.

